MODO FONTEVECCHIA
ELECCIONES Y ECONOMÍA

Eduardo Levy Yeyati: "Es suicida, desde el punto de vista fiscal, la eliminación de Ganancias"

El economista de JxC cuestionó los últimos anuncios de Sergio Massa y los equipos económicos de Javier Milei. Además, destacó la incorporación de Carlos Melconian al equipo de Patricia Bullrich.

Eduardo Levy Yeyati 20230602
Eduardo Levy Yeyati, en la entrevista con Jorge Fontevecchia | MARCELO DUBINI

Eduardo Levy Yeyati, referente del equipo económico de Juntos por el Cambio, sostuvo que tener “tres o cuatro personas” no es suficiente para tomar el timón del país. “Hay una diferencia entre mirar el país desde la capital y desde el interior, porque los problemas son distintos”, aseguró en Modo Fontevecchia, por Net TV, Radio Perfil (AM 1190) y Radio Amadeus (FM 91.1).

Contanos tu visión de la Fundación Mediterránea...

La Fundación Mediterránea es una de las fundaciones económicas, fuera del AMBA, económicamente más importantes. Pero más allá de la Fundación Mediterránea, hay que resaltar que la incorporación de Carlos Melconian a su equipo.

Esto no les gusta a los autoritarios
El ejercicio del periodismo profesional y crítico es un pilar fundamental de la democracia. Por eso molesta a quienes creen ser los dueños de la verdad.
Hoy más que nunca Suscribite

Se suma a un grupo de gente que venía trabajando dentro de Juntos, con Larreta, en mi caso con la UCR, y con mucha gente que ya venía trabajando con Bullrich, con lo cual, uno tiene que tener en cuenta que una cosa es la vocería y otra el equipo económico.

Carlos Melconian: "Se desvaneció totalmente el tema de la dolarización"

Cuando uno va a un gobierno necesita cientos de profesionales, no sólo economistas, entonces, resumir todo a un nombramiento en medio de una campaña no le hace justicia a todo el trabajo que ha venido haciendo la gente de Juntos, el último año y medio, casi dos años.

Yo lo veo como el enriquecimiento de los equipos técnicos de Juntos, del mismo modo que enriquecemos ese equipo con la convergencia de grandes grupos que venían trabajando de manera paralela.

¿Vos decís que lo que vale es el equipo completo de Juntos por el Cambio y no solo el de Melconian? 

Digo, más en general, que si yo veo, más como profesional, no como votante, un candidato más tres o cuatro colaboradores, y que piensa agarrar el timón de este país, que está al borde del abismo después de cinco años de crisis y una seguidilla de fracasos económicos, empiezo a temblar.

Domingo Cavallo dijo que Milei comete un error sobre la dolarización

Eso no es así, en el caso de Juntos hay muchísima más gente trabajando con un nivel de detalle que es imposible de comunicar, pero en las campañas hay candidatos que muestran dos o tres candidatos y dicen “con esto me arreglo”, eso es ilusorio. De hecho la improvisación, y cierta soberbia, de que la cosa se resuelve fácil es lo que nos trajo hasta acá también. 

¿Te estás refiriendo a Javier Milei?

Me refiero a Javier Milei y al Gobierno también. El Gobierno muestra el plan mientras lo va haciendo, me imagino que el plan de Massa es lo que está haciendo hace aproximadamente un año, pero no muestra un equipo denso, que sea especialista en cada uno de los temas en detalle, muestra tres o cuatro personas.

Donde no veo ese equipo es en Milei, porque Massa, mal o bien, tiene un equipo, y seis o siete personas allí...

Es muy poca gente y se nota por el nivel de desmanejo y de gerenciamiento de baja densidad que tiene el Gobierno, hay cosas que no se ejecutan y no se hacen, y algunas medidas que propone están improvisadas por dos personas la noche anterior. No se ve en el día a día porque son cuestiones más técnicas pero la falta de equipo se ve en la práctica.

De Juntos por el Cambio a Juntos por Melconian

Claudio Mardones (CM): Milei le mandó una nota a Massa para que postergue la presentación del presupuesto hasta después de las elecciones. ¿Cuál es su opinión?

Mis opiniones no son sobre Milei o las personas, son más generales, sobre la forma que se presenta la campaña desde un partido político: si tengo una persona y dos asesores como todo el equipo económico, realmente siento vértigo, porque si uno mira la complejidad de lo que tenemos que enfrentar, pensar que podemos improvisar o arreglarlo sobre la marcha, me parece que es un poco arriesgado.

Ahora, en relación al pedido de Milei, creo que en estas semana veremos medidas electoralistas, para ganar la prensa o algunos medios. Por ejemplo, es suicida, desde el punto de vista fiscal, la eliminación de Ganancias, salvo que uno tenga de una contrapartida, un aumento de impuesto por otro lado o una baja de gastos que no se ve.

Es una eliminación de Ganancias que atenta, limita o condiciona al próximo gobierno, y supongo que si Massa llega a ser elegido la va a revertir.

Qué medida beneficia más a los trabajadores: ¿modificar Ganancias o bajar el IVA en los alimentos?

Pero bueno, son promesas electorales, lo mismo que esta idea de estudiar una reducción de la jornada laboral cuando lo único que no se crea en la Argentina es empleo formal.

En el caso de Milei, creo que también es una jugada electoral, del mismo tipo al que nos tiene acostumbrados el populismo de izquierda o kirchnerista, llamémoslo populismo de derecha, es el tratar de arrogarse un poder de incidencia un proceso que está legalmente determinado y que es la presentación del presupuesto.

Si después el presupuesto se tiene que modificar o revisar, se revisará, pero las fechas legales son fechas legales.

No creo que tengamos que tomarlo literalmente este pedido, sino más bien es una forma de Milei de hablarle a Massa por arriba de Juntos, que es hoy la verdadera oposición.

Encuesta pone en alerta rojo a Milei y Kicillof: les da muy poca ventaja sobre Bullrich, Massa y Grindetti

Se sabe que Milei llevaba y habla con gente de Massa, que va gente de Massa en las listas, y eventualmente creo que apuesta tener un entendimiento con Massa si alguno llega al poder. Por eso, pensémoslo desde el punto de vista electoral: lo único que está queriendo hacer es ganar cámara.

CM: Germán Martínez, el jefe del bloque del FdT de la Cámara Baja, confirmó que presentaron el proyecto para eliminar la cuarta categoría del impuesto a las ganancias, y Macri en su campaña también lo propuso. ¿Cuál es su punto de vista? ¿Cree que es solo una cuestión de campaña?

Lo que es malo ahora fue malo antes, hay que tener siempre la misma vara. Cuando Mauricio Macri salió a prometer la eliminación de Ganancias, durante la campaña, con una motivación estrictamente electoral (porque de hecho nunca lo hizo), me parece que estuvo mal, y creo que todo el espacio de Juntos lo entiende así, que fue una mala idea, creo que se ha reconocido ese error.

Que eso lo haya dicho un representante de nuestro espacio hace ocho años no implica que nos tengamos que quedar callados y aceptar una idea que es estrictamente electoral. Con la gravedad de que, mientras en aquel momento era una medida de la oposición que nunca llegó al Congreso, ahora lo está promoviendo el gobierno en ejercicio, que puede habilitarla y crear un obstáculo adicional, entre los muchos que está creando, para el próximo gobierno.

Massa: "Si tienen que ahorrar compren un autito, no me vayan a comprar dólares"

Me da la sensación de que el Gobierno está tratando de minar el campo de acción del próximo gobierno, cualquiera sea.

Y que alguien de nuestro espacio haya cometido un error, o sea haya visto tentado por una propuesta electoral, no quiere decir que ahora eso esté bien. Hay que ser muy claros con esto.

¿Cuáles serían los elementos reactivantes que produciría un gobierno de Juntos por el Cambio y que recuperarían rápidamente la Argentina?

Para empezar, se harían cosas que hace mucho se tienen que hacer y no se hacen. Nosotros no tenemos un presupuesto, un programa fiscal que sea consistente con el balance fiscal primario desde hace muchos años.

Impuesto a las Ganancias: todo lo que tenés que saber sobre los cambios en la medida

Incluso en 2019, el último año de Cambiemos, forzados por la crisis, el balance fiscal se acercó a cero, pero también con algunas medidas que eran difíciles de sostener en el tiempo. Entonces, hasta ahora no hemos tenido ninguna propuesta que se haya centrado en el balance fiscal, y hace mucho no tenemos un Banco Central que proponga un programa monetario, transparente y con apoyo político, donde realmente no haya ruidos internos.

Y hace mucho que no tenemos un tratamiento público de la deuda externa que en vez de hacer "pan para hoy y hambre para mañana", que es recortarle hoy a los acreedores, de modo que nunca más podamos pedirles prestado, tenga como objetivo recuperar el financiamiento público, porque sin él, ningún plan es realmente sostenible porque cada dos por tres tenemos un problema de estrés financiero, posiblemente default y volvemos para atrás.

Si nosotros desde el día uno planteamos eso, más una serie de reformas, eso por sí solo ya cambiaría la manera de pensar la economía. La Argentina tiene muchas potencialidades desde hace muchos años, que si logramos destrabar, tienen que manifestarse inmediatamente.

Massa anuncia medidas para monotributistas, jubilados y trabajadores

El problema es que esas potenciales no son sugerentes para el desarrollo si uno tiene un Estado que genera un régimen perverso, que fuerza la offshorización, la informalización, e incluso a tratar de eludir estar en Argentina, porque nuestra Argentina siempre está a tiro de una confiscación tributaria.

Entonces, me parece que tampoco es mucha ciencia ni se trata de salidas exóticas, simplemente con poner sobre la mesa un programa consistente, muchos de esos inversores que hoy no tocarían nada de la Argentina, volverían a probar.

Desde el punto de vista de experiencias anteriores, en el caso inflacionario, ¿el plan de Israel, de los años ochenta, tiene algún punto de inspiración o es aplicable en el siglo XXI?

Creo que sí. El plan de Israel en los ochenta fue idéntico al Plan Austral, la única verdadera diferencia es que en Israel hubo un consenso pro reformas, que incluyeron reformas institucionales y un pacto con la oposición que se cumplió. Mientras que nosotros solo nos enfocamos en bajar la inflación para ganar una elección, pero nos olvidamos del consenso institucional y sobre todo de las reformas.

Ganancias: de cuánto es el salario que se usa para calcular el piso del impuesto

Si nosotros en 1985 hubiéramos hecho las reformas y si Alfonsín hubiera tenido la posibilidad de generar cierto consenso alrededor del plan, con sus reformas, podríamos haber sido Israel. Hubo otros factores obviamente que favorecieron a Israel, incluyendo préstamos e ingreso de capitales que nosotros no teníamos, pero nos habría ido mucho mejor.

Entonces, ese plan de Israel, salvando las distancias (porque ningún país es igual a otro y nuestros problemas ahora son distintos que los de los ochenta), esa idea de que uno con un plan de estabilización, más reformas, más un mínimo consenso político alrededor de las reformas, se sale de la recesión, en el caso de Argentina sigue siendo válido, nadie lo ha hecho hasta ahora.

El crecimiento de la UCR

Vos representás al radicalismo, ¿cómo analizás el éxito de gobernadores radicales a lo largo del país? ¿Ves posible que se termine con cinco gobernadores radicales a fin de este año? ¿En qué se diferencia el radicalismo del PRO? ¿Qué le puede aportar el radicalismo a los halcones del PRO?

Primero, yo aclararía la distinción entre halcones y palomas, a la cual siempre me opuse, fue una distinción que les hablaba a los votantes de Juntos para una interna, esa página ya se dio vuelta.

Aseguran que el triunfo de Pullaro, “no es nacionalizable, pero sirvió para la foto de Patricia Bullrich

Los equipos de los llamados halcones, palomas y los políticos de ambos lados están trabajando juntos ahora, entonces dejemos de lado esa semántica de interna que ya pasó o ya se saldó.

En el caso del radicalismo, tenemos que decir que tres de esas provincias ya venían gobernadas por el radicalismo. Entonces, la preservación de esas provincias es señal de que fueron bien gobernadas, las gestiones en Corrientes, Jujuy y Mendoza fueron buenas y la gente reconoce eso, más allá del cambio.

Me refiero a Santa Fe y Chaco...

Lo de Santa Fe ha sido una campaña extraordinaria de Maximiliano Pullaro, hablándole a la gente más directamente y menos desde la capital y a través de los medios masivos. Creo que eso es una buena señal y él entendió por dónde pasa la campaña este año, cuál es la comunicación que uno debe tener con los votantes que están desencantados y con bronca.

Eso valora una forma de hacer campaña de acercamiento, que se sienta sobre algo característico del partido radical, en contraste con el PRO, que es que tiene una estructura mucho más federal, un partido histórico, con muchísima gente trabajando a nivel federal, y como muchísima gente con experiencia y conocimiento territorial.

D'Arrigo: "Santa Fe puede ser el último bastión del larretismo"

Eso es un gran valor agregado para Juntos, y le da, aparte, un oído federal. Nosotros, a veces, tenemos una visión muy sesgada de lo que pasa en el país, y el partido, al tener terminales federales, de alguna forma compensa es "porteñización" de la política. Así que me parece que todo suma y que es una complementación perfecta.

¿No hay diferencia de perspectiva, de visión, entre el radicalismo y el PRO, independientemente de la semántica?

Hay una diferencia entre mirar el país desde la capital y desde el interior, porque los problemas son distintos. En el interior hay muchas provincias exportadoras que no pueden exportar por el esquema macro de distribución que propone un gobierno desde Buenos Aires.

Posiblemente haya un sesgo hacia lo productivo y problemas de logística, distribución y conectividad, que desde Buenos Aires parecen menores. Y esto es importante, porque hay que entender que el país es mucho más diverso de lo que se ve desde Buenos Aires.

Maximiliano Pullaro: "Vamos a dejar nuestra vida en estos cuatro años"

Y cuando uno está en la campaña y quiere gobernar, tiene que representar toda esa diversidad que a veces se ve un poco a la distancia desde acá. Esas consideraciones hacen que algunas de las propuestas del radicalismo estén más empujando a lo productivo, la inserción territorial y la conectividad.

Mientras que las propuestas del PRO tienen que ver más con cuestiones transversales o de inserción internacional. Son visiones que se complementan. Ahora, dentro del PRO y el radicalismo también hay heterogeneidad y eso es perfectamente reconciliable.

MVB JL